Es imposible entender la música de los últimos 25 años sin hacer
referencia a Creation Records.
Desde este sello
fundado por Alan Macgee, Joe Foster y Dick Green en 1983, se lanzaron algunos
de los discos y singles más importantes de la Historia de la Música. Por poner
algunos ejemplos, bastante obvios por otra parte, el Loveless de My Bloody Valentine, Screamadelica de Primal Scream o Upside Down, el primer single
de The Jesus And Mary Chain.
Además, todo lo
referente a este sello tiene un significado sentimental muy importante para mí.
He crecido con su música, algunos de sus discos lo pongo a diario, soy
coleccionista compulsivo de cualquier referencia de este sello, aunque no de
todas ya que sobre todo en sus últimos años perdieron un poco el olfato para
fichar buenas bandas ( Heavy Stereo, uno de los casos más clamorosos).
Se pueden
distinguir tres etapas dentro de Creation Records:
La primera, que va desde su primer lanzamiento,73 in 83 por The Legend en 1983, posiblemente uno de
los 3 peores lanzamientos dentro del sello (no sé por qué he dicho 3, hay unos
cuantos más : Les Zarjazz, Church Of Raism o incluso Duncan Dhu, que no sé cómo
lograron editar un disco en Creation) a 1988 y en la que se pueden destacar
los primeros discos de The Jasmine Minks, Biff Bang Pow!- uno de los proyectos
de Alan MacGee y también uno de mis grupos preferidos de Creation - y también los
primeros singles de The Loft de los que saldrían The Weather Prophets, el
increíble primer single de The Revolving Paint Dream Flowers In The Sky, dando inicio a uno de los proyectos más
enigmáticos del sello.
A esta época pertenecen canciones tan imprescindibles como Therese de The Bodines o Velocity Girl, ambos incluidos
en el famoso recopilatorio C86 de New Musical Express, acta fundacional de todo
un movimiento y una forma de entender el indie.
También fue
durante esta primera época cuando Felt, recién fichados, editarían sus mejores
trabajos como el genial Forever
Breathes the Lonely World (1987) o
una de las grandes promesas del sello The House of Love debutarían con Shine On,
para luego irnos regalando joyas como Christine o Destroy the heart y su maravilloso y homónimo primer
disco.
Momus daba muestra
de su talento con su genial Tender
Pervert y otros grupos como
Apple Boutique o Meat Whiplash editaban sus únicas e imprescindibles
referencias: Love Resistance y Don´t
Slip Up, respectivamente.
Esta primera etapa
se cerraría con el primer disco de My Bloody Valentine, Isn´t Anything (1988) que
sería el inicio de los, por lo menos para mí, años dorados de Creation (de 1988 a 1994) aunque
sé que para mucha gente es la primera etapa la realmente importante.
La segunda etapa
(1988-1994), es la de la explosión del sonido Shoegaze con bandas como Ride, The
Boo Radleys, Adorable, Swervedriver, Slowdive o los más psicodélicos The
Telescopes.
Otros fichajes importantes de la época fueron Sugar, el grupo de Bob Mould de Hüsker Dü, en el que se reivindicaba como el padrino del grunge y, a su vez, como figura de referencia del Indie.
Otros fichajes importantes de la época fueron Sugar, el grupo de Bob Mould de Hüsker Dü, en el que se reivindicaba como el padrino del grunge y, a su vez, como figura de referencia del Indie.
Ride debutarían con el imprescindible Nowhere (1990), disco al que guardo especial cariño ya que fue la
primera referencia de Creation que compré un verano que pasé en Inglaterra.
Teenage Fanclub grabarían uno de los mejores discos de su carrera Bandwagonesque (1991), con el que inauguraban su carrera dentro de
Creation. Pero sin duda alguna hay dos discos que marcarían esta etapa y
revolucionarían el mundo de la música: Loveless
de My Bloody Valentine y Screamadelica de
Primal Scream, editados también en 1991, para mí el mejor año de Creation
Con Loveless (1991) casi se arruina el sello debido
a las contínuas exigencias y perfeccionismo de Kevin Shields.
Costó alrededor de 250000 libras y empleó 17 ingenieros de sonido y productores. Pero lo importante es que se trata de uno de los mejores discos de la Historia y nunca está de más una leyenda de excesos para agrandar el mito.
Costó alrededor de 250000 libras y empleó 17 ingenieros de sonido y productores. Pero lo importante es que se trata de uno de los mejores discos de la Historia y nunca está de más una leyenda de excesos para agrandar el mito.
Lo que nadie sospechaba es que tardarían 22 años en darle
continuación con MBV.
Screamadelica (1991) supone la mezcla perfecta entra
rock y electrónica. Su influencia ha sido determinante e hizo que mucha gente
que había rechazado la música electrónica se metiese de lleno en ella. Este álbum
no sería lo mismo sin la increíble producción de Andrew Weatherall. Sólo por
estos dos lanzamientos, Creation debe ser considerado uno de los sellos más
importantes e influyentes de la Historia.
Dos discos que pasaron más desapercibidos y que y con los que casi
se dio carpetazo al shoegaze, pero que son auténticos clásicos de culto son Souvlaki de Slowdive y Against Perfection de Adorable, ambos de
1993.
Ese año quienes se llevaron todos los elogios de crítica y público
fueron The Boo Radleys con su Giant Steps,
quizás el ultimo gran disco del shoegaze y es que esta obra maestra trasciende
cualquier género.
Esta segunda etapa se cierra con el lanzamiento en 1994 de Definitely Maybe de Oasis, con el que
alcanzarían el exito comercial pero también supondría el fin de la
independencia del sello ya que se vendió a Sony, cuenta la leyenda, para
evitar la ruína creada por Loveless.
Este disco sería el inicio del Brit-Pop como respuesta un poco
tardía al grunge americano, y volvería a situar al pop británico en el centro
de la actualidad, aunque sólo nos daría un par de obras maestras, el debut de
Oasis y el Parklife de Blur y unos
cuantos discos y grupos mediocres como Sleeper, Drugstore, Shed Seven, Marion o los muy risibles Menswe@r.
Salvamos a Gene por méritos propios -dos obras maestras como Olympian y Drawn to the Deep End que deben ser reivindicadas- y excluimos a
Pulp, que triunfaron en esa época, pero eran mucho anteriores y no explotaban
esa especie de orgullo Británico que sí hacían el resto de bandas en estética
y sonido.
La tercera etapa (1994-2000), supone la decadencia del sello y su
fin, aunque aún nos daría un puñado de obras maestras como XTRMNTR de Primal Scream, que sería la última referencia del sello,
Good Humor (1998) de Saint Etienne o Radiator de Super Furry Animals editado
en 1997, una de mis bandas preferidas.
Este disco sirve como perfecto resumen de lo que supuso el sello
durante los años que estuvo funcionando. Evidentemente se quedan fuera algunos
temas imprescindibles (There Must be a Better
Life de Biff Bang Pow! el caso
más sangrante) pero no falta ni uno de los que hicieron legendario a este
sello.
Por cierto, Alan McGee ha vuelto a la actividad con un nuevo sello
359 Music. Esperemos que no haya perdido el olfato y aún nos pueda sorprender
con alguna banda a la altura del legado de Creation, algo que creo que va a ser
complicado.
Allmusic, dice: "Modest title, eh? While it's true that Creation became the U.K.'s most important independent record label, the self-serving praise grows as tiresome as Liam Gallagher's umpteenth boastful comment. What were the other great indies between the period covered here? Chopped liver?
With the corpse of Alan McGee's label still fresh, their distribution outlet via Sony released this two disc set in late 2000, compiling 30 highlights of the label's lifespan. McGee selected these tracks, thankfully balancing the known hit with the buried gem rather well. Some of his choices are questionable, like choosing early acts like Slaughter Joe and Meat Whiplash over Revolving Paint Dream and his own Biff Bang Pow.
Choosing Ride's "Drive Blind" over the more representative "Vapour Trail" and favoring the House of Love's "Shine On" over "Christine" is a bit bizarre. Pop elitists will chuckle at Teenage Fanclub's two inclusions over Oasis' lone entry.
Many don't realize that the label had a history prior to Oasis' Definitely Maybe, and even more don't realize that the label had a history prior to Primal Scream's Screamadelica, which International Guardians illustrates. It does trace something of a timeline in trendsetting British music, from the Jesus and Mary Chain's Velvet Underground-with-daggers, then Primal Scream's dancefloor hedonism, and on to Oasis' retro polishing.
The biggest omission is clearly My Bloody Valentine's otherworldly dream pop; allegedly, Kevin Shields pulled his band's three tracks just prior to release.
Later acts aren't forgotten, such as Super Furry Animals and Bernard Butler's first solo single. Like the label's ascension from the gutters to the penthouse, International Guardians is a thrilling, bumpy ride. Frustrating but ridiculously accomplished." by Andy Kellman
